Me encontraba en el hospital cuando cobre conciencia, creía que la primera persona que vería seria Sakura, en su lugar se encontraba Tetsuya quien al ver que reaccionaba no dudo en abrazarme, inmediatamente yo pregunte por Sakura a lo que Tetsuya contesto, con un gesto de decepción-
T-No ha venido, e intentado comunicarme con él, sin embargo no contesta, lo he ido a buscar y tampoco…-no termino la oración, es como si hubiera recordado algo, Tetsuya cerró los ojos, trago saliva como si quisiese tragar una pena y continuo-…tampoco he sido capaz de verlo.
H- ¿Cuántas horas llevo aquí?-en cuanto termine de hacer la pregunta, Tet puso un gesto de angustia, como si lo que fuese a decir se tratara de algo malo, enseguida tomo mis manos, acerco su rostro al mío y sonrió.
T- pronto estarás bien mi pequeño Hyde, te he cuidado lo suficiente para que te puedas levantar, debo presumir que te he cuidado tan bien que hoy mismo saldrás de aquí, y debes saber que este cuidado no ha sido en vano, solo ha sido con la razón de volver a ver tu sonrisa, pues en estas 2 semanas que has estado dormido extrañe tus travesuras…- de pronto una lagrima asomo en el rostro de Tetsuya, pero esta pronto fue opacada por su sutil sonrisa.
El temor me invadió, 2 semanas había permanecido dormido, pronto quise que me explicara que había sido de mí, sus palabras me atemorizaron por completo, sentí que mi vida había acabado cuando me dijo que se trataba de una enfermedad desconocida, hasta la fecha solo existían 2 casos de aquella enfermedad , la cual consistía en la falla repentina de los sistemas y órganos de nuestro cuerpo, en esta ocasión había fallado mi vista, mi respiración y mi sistema nervioso de tal forma que había caído en un coma temporal, existía la posibilidad de que no despertara y no solo eso, mi organismo podía volver a fallar en cualquier momento. Una profunda depresión tomo lugar en mi corazón, no había forma de que controlara mi propio organismo, podía morir en cualquier momento, jamás hubo espacio en mi mente para que una enfermedad tan grave habitara en mí, sin darme cuenta estuve al borde de la vida, pensé <<el sueño ha terminado no podré cumplir las promesas que he ido dejando, esta enfermedad se llevara consigo mi vida ¿acaso es este el fin?>>.
Por otro lado en esas 2 semanas Sakura no había aparecido para verme, pronto recordé sus últimas palabras hacia mí, la idea de que nos separáramos también broto, el llanto fue
insoportable, Tetsuya no dudo en abrazarme, ese abrazo que termino por desgarrarme, y así una vez más el dolor en mi pecho comenzó a aparecer, era como si alguien me aplastara contra el suelo, mi respiración se dificulto, Tetsuya rápidamente llamo a los doctores, sin embargo no podían hacer nada más que darme antibióticos con la esperanza de que disminuyeran el dolor, el cual cedió pasados 4 minutos, minutos en los cuales mi resistencia estuvo al borde, pues se trataba de un dolor profundo que penetraba hasta mis huesos, recorría mi piel enfriándola, era un dolor cercano a la muerte.
Debido al ataque debía pasar otros 3 días en vigilancia, acostado en la cama de hospital, rodeado de paredes blancas sin color, sin imágenes, sin aromas, el único aroma que prevalecía en mi mente era el de Sakura del cual supe hasta el segundo día, Tetsuya me dijo que había logrado hablar con él, y le había informado de mi situación, también le había dicho que al siguiente día me darían de alta, yo en ese momento desee que pasara el tiempo en un parpadeo, estaba seguro que Sakura iría a recogerme, tenía tantas ganas de verlo, como extrañaba su presencia, lo necesitaba.
Llego el tercer día, eras las 11 de la noche cuando irían a recogerme, me encontraba listo en la salida del estacionamiento cuando una camioneta negra se paró frente a mí, en su exterior un enorme letrero la adornaba, el letrero decía: “bienvenido a casa Hyde, te extrañamos”, de la camioneta bajaron: Testsuya, Ken, Ryo y nuestra managger Hinamori, me abrazaron, me cargaron y pusieron de fondo nuestro último single terminado, me sentía muy alegre pues todos ellos me recibían con mucho amor, sin embargo no fue suficiente, en mi mente existía la esperanza de que Sakura bajara de la camioneta, deje de escuchar ruido, las palabras que me decían se perdieron en la obscuridad de la noche, mis ojos iluminados solo por la luna se concentraron en la puerta de la camioneta, una sombra se distinguía en su interior una sombra que se iba aproximando a la salida, abrió la puerta, mis latidos comenzaron a acelerarse, me llene de alegría pero estaba obscuro y no lograba ver su cara, iba vestido de negro, su figura también se perdió en la negrura, no sabía si en verdad era el, conforme se iba acercando distinguía más su rostro, una vez cerca extendió su mano derecha y con voz gruesa dijo <<mi nombre es Yukihiro mucho gusto en conocerte Hyde-san>>, un nudo se ató en mi garganta, la adrenalina desapareció, mi corazón comenzó a latir más despacio, por un momento la decepción me hipnotizo, una voz a lo lejos me grito -<<salúdalo Hyde>>-era Hinamori-, reaccione rápido y le di la mano al mismo tiempo note que en su otra mano sostenía un pastel el cual no dudo en darme diciendo <<felicidades por volver>>, tome el pastel con ambas manos, todos comenzaron a aplaudir y mi mente se nublo, una vez mas no escuchaba nada, el recuerdo de Sakura no se alejaba, parecía una despedida, todo era obscuro, mis manos comenzaron a flaquear, el nudo que guardaba en mi garganta aumento de tal forma que no lo pude contener más, una lagrima escurrió, de pronto el verdadero silencio por parte de todos apareció, no tuve
fuerza para sostener el pastel, cuando menos me di cuenta se encontraba en el suelo, no me importo, dirigí mi vista a alrededor, solo quería encontrarlo que entre cada rostro que me rodeaba apareciera el de él, como era de temer mi esperanza quebranto, no se encontraba en ninguna parte, en ese momento supe que era hora de decir adiós, no pude contener más lágrimas, incluso mi voz colapso, comencé a correr sin dirección, desesperadamente, como si a unos pasos él se encontrara, corrí sin detenerme hasta que mi respiración no aguanto, no sabía dónde me encontraba, comencé a espantarme, había un frio espeluznante, y aun así mi llanto no cesaba, pronto unos brazos me tomaron por detrás y se aferraron a mí,
T-¡Hyde, el no vendrá hoy!– su voz era suave e inconfundible, era mi fiel amigo Tetsuya-… tranquilízate, tal vez no ha podido llegar…- Tetsu titubeo al terminar de hablar, no tarde mucho notar que mentía.
H- Tetsuya, no me mientas más, dime ¿dónde se encuentra Sakura?, solo quiero saber si se encuentra bien, Tetsu dime donde esta!!!!!!!...- me di la vuelta y lo sujete de los hombros, comencé a sacudirlo de tal forma que parecía que iba a golpearlo, pero no era así, por dentro un dolor que no podía ser dicho me domino, las lágrimas de desesperación me impedían mirar a sus ojos.
T-¡no se! , perdóname Hyde, no sé dónde se encuentra ahora, pero está bien….él se encuentra bien….
Una vez más su gesto de melancolía lo acompañaba, algo ocultaba Tet, no quise perder más tiempo, tome un taxi y me dirigí a casa de Sakura.
La casa se encontraba totalmente alumbrada, el ruido que del lugar salía era tan grande que podía ser percibido desde la esquina de la calle, era una mezcla de risas y música alegre, me decidí entrar, mi sorpresa fue inmediata, había una cartel negro del tamaño de la pared, con letras rojas que decían “feliz cumpleaños Hiroshi”, todos se encontraban tomando y bailando, no me detuve mucho a ver lo que pasaba, me dirigí al patio, entre tanta multitud de personas me era difícil reconocer a Sakura, hasta que finalmente en el rincón de su patio se encontraba fumando mientras platicaba con sus amigos, me dirigí hacia él, sin embargo no sabía que hacer solo quería estar junto a él, al verme inmediatamente dejo a sus amigos y también se aproximó a mí, una vez cerca espere su abrazo, pero no fue así, en su lugar una ola de palabras que hundieron mi alma
S-¡Hyde!, qué bueno que ya estás bien, me alegra mucho!, llegas justo a la fiesta, estamos celebrando a mi amigo Hiroshi hoy es su cumpleaños número 28
H- Sakura…yo acabo de salir del hospital
S- por eso, qué bueno que llegas a la fiesta, podemos celebrar doble… -miro a sus amigos y todos comenzaron a reír, parecía una burla que a todos causaba gracia
H- Sakura!!!, he venido hasta aquí no a festejar junto a tu amigo, no vine porque no tengo a donde más ir, solo vine porque te extrañaba, y no podía estar más sin ti.
S- vamos no me digas que me amas, Hyde lo nuestro ya termino desde hace mucho tiempo atrás, he encontrado alguien que me atrae más que tú, lo siento si no viniste a divertirte tu no podrás estar aquí…
Mi voz desapareció, no tuve fuerzas para decir nada, no me importo que alrededor de mi hubieran muchas personas, mi llanto siguió irresistible, en un segundo había perdido mil suspiros y en cada suspiro un sueño, en cada sueño una sonrisa y en cada sonrisa Sakura. Comenzó el tiempo de la melancolía, mi fracturado corazón se hundió en completa oscuridad y sus palabras que resonaban como eco, terminaban por adornar mi dolor.
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