domingo, 2 de octubre de 2016

Replay, capítulo 15

====== Simbología ==========

S: Sakura                                                       Ry: Ryu
H: Hyde.                                                          Yk: Yuki 
P: Padre (Seiya)                                            
A: Akane.                                                        
Y: Yu                                                               
Ha: Hana
M: Mitzuki
R: Ren
K: Ken
Ak: Akira
At: Arimatsu
* : personajes secundarios.


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Me levanto temprano para prepararme para este día, en esta ocasión Hyde se queda conmigo para desayunar, terminando me pongo a tender la cama mientras él me ayuda con los platos, es raro verlo lavando pues se supone que el rey no debería hacer ese tipo de tareas, pero es muy lindo verlo así.


Posteriormente preparo el agua para bañarme, antes de entrar veo que Hyde me mira de una manera bastante particular, comprendo que quiere y aunque estoy nerviosa decido seguirle el juego.


S: ¿Quieres acompañarme?
H: Encantado.


Entra conmigo al baño, me apuro a quitar la ropa, ni siquiera me atrevo a mirarlo pues aún me da mucha pena, Hyde me imita y entra a la tina.


H: Déjame limpiar tu espalda - me volteo y lo dejo hacerlo, me gusta que no hace intento por otra cosa.
S: Ahora yo - invertimos los papeles y me dedico a limpiar su espalda, me gusta tocarla.


Continuamos con nuestro baño, siempre pensé que un hombre y una mujer cuando están sin ropa es para tener intimidad, pero es agradable darte cuenta que podemos compartir el baño sin llegar a algo más.


Una vez que el agua se ha enfriado, salimos, nos secamos y nos vestimos, la ropa que me fue dada me queda a la perfección, el velo cubre casi todo mi rostro dejando solo a la vista mis ojos, para evitar ser reconocida he decidido cambiar el color natural de mis pupilas, de un color miel hago que queden azules que es poco común en las personas, mi idea es que desde la primera impresión se den cuenta que no soy un ser humano común y corriente.


H: Que lindos ojos.
S: Gracias - cambio mi voz.
H: Vamos.


Lo sigo por los pasadizos hasta que llegamos al piso del rey, me quedó ahí esperando que sea el momento, trato de controlar mi respiración para que mis poderes fluyan de manera muy lenta.


Después de un rato, Hyde abre y me hace señas para que vaya, salgo y veo a los hombres del consejo, a Ryu, y a mi padre; en cuanto cruzo mirada con todos e inmediatamente identificó al traidor y realmente no me extraña que sea Ren.


H: Ella es de quien les he hablado - antes de que continúe hablando, uso mi poder y hago que Ren caiga en un trance muy profundo.
S: Déjenlo, solo dormí, ese hombre es un traidor y fiel seguidor de la oscuridad, observen - con mi energía muestro el verdadero ser que es.
Ry: ¿Como nunca lo notamos?
S: Un hechizo, no lo mataremos aún no, señores la oscuridad empieza a moverse, no tenemos mucho tiempo para actuar, puedo usar mis poderes para hacer vulnerable a Asmodeus, los soldados tendrán que pelear contra sus monstruos, también haré que sean vulnerables para poder matarlos, y necesito alguien que maneje bien las armas, para poder acabar con esto, no soy tan hábil con la espada, pero haré que el ser oscuro este en igualdad de condiciones para que pueda ser vencido.
P: Es un buen plan, ya no podemos seguir así, de todos modos, al señor oscuro no le importa la tregua, ya lo hemos visto


Me da bastante dolor ver los ojos tristes de mi padre, aunque lo oculte para los demás yo puedo percibir el dolor que trae encima.


S: Bien, deberán estar preparados para cuando Asmodeus comience a moverse.
H: No podremos permitir que llegue a la ciudad o será destruida.
Ry: ¿Y si ordena una evacuación?
H: No, se darán cuenta que algo planeamos.
S: Ya se han dado cuenta por boca de Ren, además tuve que liberar poder para descubrir al traidor así que la oscuridad se ha percatado de mi presencia, aun así es mejor evitar la destrucción de la ciudad, podremos intersectarlos si nos movemos rápido.
Ry: ¿Y qué haremos con esté? - señala al traidor.
H: Que se lo lleven a las mazmorras.
S: Lo dejaré así para que no cause problemas.


Ya que se llevan al traidor, Hyde le ordena a Ken tener listos a todos los caballeros para lo que será la peor batalla de la historia del reino, los demás consejeros junto con Ryu, se retiran con la orden que absolutamente nadie puede pasar al piso del rey, a causa que permaneceré aquí.


H: Deberías decirle
S: ¿Qué cosa?
H: A tu padre, él lo ocultará, pero dile, está a fuera esperándome ¿Que pase?
S: No sé si sea buena idea - suspiro - que pase.


Hyde lo manda llamar y me deja sola con él, quien me ve bastante extrañado.


S: Tuve que cambiar el color de mis ojos - me quito el velo, sin decir nada se acerca y me abraza - papá perdóname por hacerte sufrir.
P: ¿Pero cómo?


Comienzo a contarle absolutamente todo lo que sucedió y por qué tengo esas habilidades, quien me las dio y porque el señor oscuro me persigue.


P: Sabía que tu madre te protegería, creo que también te debo confesar algo sobre tu hermana.
S: Lo supe cuando se me reveló la verdad, Akane es hija tuya pero no de mi madre por eso Asmodeus no la persigue.
P: Akane fue producto de una aventura que tuve antes de conocer a tu madre, cuando supe que la madre de tu hermana había fallecido, decidí llevarla al valle y tu madre la aceptó y la quiso como una hija.
S: Afortunadamente es así o estaría siento perseguida también.
P: ¿Debo decirle?
S: No, no tiene caso que sepa su origen, no quiero que sufra, tampoco quiero que le digas que estoy viva, mientras menos sepan es mejor.
P: Tienes razón, no es el momento.


Mi padre me dejó sola pues no es muy seguro que estemos tanto tiempo juntos, se ve más tranquilo e incluso feliz, definitivamente fue una buena decisión decirle la verdad sin embargo las cosas van a cambiar demasiado pues con mi supuesta muerte no puedo estar a la vista de quienes me conocieron, sé que eso solo traería problemas para la gente que amo.


Lo que resta de la mañana me la paso observando el patio, extraño poder salir y entrenar, vaya que el precio que estoy pagando para salvar el reino es bastante alto.


Escuchó un ruido en el despacho, salgo y veo que es Yuki, hace que todos mis sentimientos se remuevan.


Yk: Disculpe, estaba buscando al rey - su mirada es desconfiada.
S: Hola - le hablo con cariño - su majestad salió, soy una invitada del reino.
Yk: Siento molestarla - está a punto de irse.
S: ¿Estas triste?
Yk: ¿Sabes lo que pasó?
S: Se muchas cosas, y veo que estas triste, ¿Sabes cómo es la mejor forma de recordar a alguien que se ha ido?
Yk: No.
S: Siendo felices, se la historia de ella y créeme que lo que más desea es verte feliz, estoy segura que eso la hará sentirse bien, vive por ella, sonríe todos los días y lucha por lo que deseas - sus ojos se llenan de lágrimas, me inco y las limpió.
Yk: Gracias, lo haré, ¿Puedo abrazarte?
S: Nada me haría más feliz - me abraza y la recibo con todo mi cariño.


Entra Hyde quien observa esa escena, en cuanto Yuki se percata, me suelta.

H: Siento interrumpirlas, ¿Necesitabas algo Yuki?
Yk: Quería pedirte un consejo, pero ella ya me lo dio ella.


Hyde le revuelve el cabello y le regala una sonrisa, Yuki hace doble reverencia y sale con una sonrisa de oreja a oreja.


H: ¿Le dirás?
S: No, ya sabe que quiero que sea feliz, no tiene caso confundirla con todo esto - de manera repentina va y me abraza - estoy bien.


“Estoy bien” palabras tan grandes y tan falsas en absoluto estoy así por el contrario me siento agobiada y con una enorme tristeza.


S: Necesito que me digas quien peleará contra el señor oscuro, tengo que hacer un hechizo para poder ayudarlo.
H: Yo lo haré – lo que tanto temía.
S: Tú no, por favor.
H: A ver mi niña - toma mis manos - soy el rey esto es mi obligación, no permitiré que toque a mi pueblo, tampoco voy a dejar de pelear al lado de mis camaradas, ¿Puedes comprenderlo?
S: Sí, entonces a ti te haré el hechizo, para poder protegerte te entregaré un pedazo de mi alma, pero al hacerlo sabré todo de ti, hasta lo que no quieres que sepa.
H: No me molesta en absoluto, al contrario, me agrada que lo sepas todo.
S: Bueno, que nadie entre, por ningún motivo deben interrumpirme.


Hyde me lleva a su recamara, el lugar es bastante grande, tiene varios closets, libreros y su cama es más amplia de lo común, antes de encerrarnos, ordena que nadie nos moleste…


Hago que se hinque sobre la cama, me pongo en la misma posición y pego mi frente a la suya.


H: Moriría de celos si hubieras hecho esto a otro.
S: Guarda silencio - le doy una palmada en la cabeza.


Me concentro y dejo que mi energía fluya, entró en su cabeza, camino por los pasillos de su mente, hay miles de puertas cada una de ellas representa una parte de su vida, la puerta que busco es la más importante y profunda: donde está su alma.


Observo sus recuerdos cuando era un pequeño niño y tenía una enorme sonrisa en su rostro, corría por el castillo haciendo travesuras y curioseando por todos lados, su madre lo amaba y consentía tanto; más adelante veo que una terrible enfermedad arrebató a su madre, mi pobre niño sufrió mucho, lloraba y lloraba por ella, en su inocencia infantil recobró sus juegos y un poco de su alegría. En otra puerta puedo observar el momento en el que su padre falleció, a causa de una pelea resulto mal herido y nada pudieron hacer por él, desde ese momento Hyde se sintió muy solo y fue cuando cambio a convertirse en un joven serio y solitario; en otra puerta veo su juventud, sus aventuras con mujeres, me siento incomoda por ver eso y también un poco celosa, pasó rápido de ahí.


Llego a los recuerdos compartidos con él, todo lo que vivimos, como nos conocimos, lo que pensaba de mí, las cosas buenas, malas, dolorosas, todo. Me hace sentir bien saber que ahora pertenezco a sus memorias, que ahora formo parte de él.

Continuo recorriendo su mente hasta que llego a la puerta más profunda, la abro y solo hay un enorme vacío y es que así es como debe estar, esta puerta solo es el camino a su alma pero yo no debo recorrerlo ya que un error podría costarle muy caro, me concentro y tomo un pequeño pedazo de mi alma: una pequeña piedra azul la contiene, hago que duerma pues debe permanecer así hasta que llegue el momento de usarla, la aviento al fondo, con eso será suficiente, cierro la puerta y camino de regreso, me quedó unos momentos observando otros pasajes de su niñez pues me agrada de sobremanera verlo sonreír y ser feliz.


Llego a la salida por lo que me regreso a mi cuerpo, Hyde cae desmayado, es normal pues invadir su mente no es cualquier cosa, lo dejo dormir ya que este tipo de conexiones gastan demasiada energía.


Me levanto y busco agua ya que sido presa de una gran necesidad de líquido, me pongo a curiosear en la habitación y termino sentándome junto a Hyde mientras leo un libro. Después de un buen rato comienza a despertar…


S: Hola ¿Cómo te sientes?
H: Duele mucho mi cabeza.
S: Es normal - le sobo la frente.
H: Me siento normal, aunque se supone que ya no lo soy - me hace reír.
S: Eres normal, además mi hechizo está dormido aún, sentirás la diferencia cuando lo despierte, no te preocupes demasiado - beso su mejilla.


Él acaricia mi mejilla y me besa con bastante intensidad, al grado de sentir que no puedo respirar, a pesar de eso me siento bien, me agrada.
¿Voy a ser capaz de dejarlo ir? No quiero hacerlo, realmente lo quiero demasiado.


Me jala y termina tirándome en la cama.

H: Me gusta tenerte así - besa mi mejilla.
S: Por cierto, necesitó pedirte un favor, quiero que me prestes la espada de tu madre.
H: Claro, pero ¿Piensas pelear?
S: No puedo alejarme de la zona de batalla, mientras más lejos este, más poder tendré que liberar y eso es muy malo.
H: ¿Porque?
S: Mira, tener mucho poder y liberarlo todo, trae consecuencias adversas, en mi caso es mucho peor porque no solo tengo el poder de mi madre, también tengo el de tu madre.
H: ¿Cómo es eso posible?
S: La vez que me defendí del bandido, la espada no reaccionó por mí, sino porque tu madre uso sus poderes para poseer mi cuerpo y cuando eso sucede dejas una parte de tu alma en el cuerpo poseído.
H: ¿Entonces tienes algo de mi madre dentro de ti?
S: Algo así.
H: Ahora me siento un tanto incestuoso - ríe.
S: No seas payaso - le doy un golpe en su cabeza - solo es un pequeño fragmento de su alma dormida en mí, pero si libero toda mi fuerza se despertaría y liberaría la fuerza de tu madre y yo podría hasta morir o algo peor.
H: Ten cuidado - pone cara de preocupación.
S: Eso no pasará yo soy precavida, ya no te preocupes - le acaricio el cabello.


Para matar el tiempo Hyde empieza a enseñarme su guardarropa que es muy extenso, incluso más que el mío, me da gracia pues parece que es bastante vanidoso. Más tarde comemos juntos y nos la pasamos platicando sobre sus travesuras infantiles.


Ry: Majestad con su permiso, señorita.
S: Gracias por venir, necesito que prepare estos ingredientes.
H: ¿Para qué son?
S: Voy a hacer invulnerables a los soldados para que peleen en igualdad de condiciones contra los súbditos del señor oscuro, esos ingredientes son para una pócima especial.
Ry: Tendré todo listo.

S: Apresúrese, pronto será el momento, el señor oscuro ha empezado a moverse.

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