====== Simbología ==========
S: Sakura Ry: Ryu
H: Hyde. Yk: Yuki
P: Padre (Seiya)
A: Akane.
Y: Yu
Ha: Hana
M: Mitzuki
R: Ren
K: Ken
Ak: Akira
At: Arimatsu
Y: Yu
Ha: Hana
M: Mitzuki
R: Ren
K: Ken
Ak: Akira
At: Arimatsu
* : personajes secundarios.
Los
días han pasado rápido ahora solo faltan dos días para el baile, por petición
de mi padre he regresado a desayunar con ellos, todo para que Yuki se sienta
mejor.
P:
Recuerden que en un par de días es el baile.
A:
Sí - como siempre está de malas.
P:
Yuki supongo que nunca has ido a un baile.
Yk:
No.
P:
¿Sakura crees que haya problema si la llevamos?
S:
No hay ninguno, su majestad ya me lo había planteado.
P:
Entonces tenemos que comprarte un vestido para el evento.
S:
Tampoco es necesario, su majestad me pidió que mandara traer un vestido para
Yuki.
Yk:
Hyde es muy bueno - dice emocionada.
A:
No lo trates de igual, es su majestad, no seas igualada.
S:
Él le dio permiso, además es una niña, no es tan grave.
Yk.
Tú también le dices así cuando están solos - comienza a darme un ataque de tos.
Mi
padre comienza a reírse pues esta niña me ha dejado en vergüenza, debo ser
cuidadosa o sin quererlo me meterá en un problema.
A:
Ahora entiendo de dónde sacó lo confianzuda - dice molesta.
P:
No empiecen, Sakura te encargo que tengas lista a Yuki.
S:
Si, padre.
Terminado
mi desayuno me dirijo a mis clases donde ya domino a la perfección al
dragonoide, por lo que Ken me da la maravillosa noticia que muy pronto pasaré a
la etapa más difícil: montar dragones, eso me pone nerviosa pero a la vez muy
emocionada. En cuanto acabo mi entrenamiento, tomo mi comida y me dirijo con
Hyde donde me pongo a organizar mi trabajo.
Ya
entrada la tarde, entran el anciano Ryu, Ren y mi padre.
Ry:
Majestad hemos interceptado una carta del señor oscuro - eso no es bueno - es
una petición de sacrificio.
H:
Aún es muy pronto, dámela - me quedo observando, en cuanto acaba de leer me
voltea a mirar muy preocupado - no, y no esto no lo voy a permitir.
P:
Esa carta iba a mi valle ¿Qué dice?
H:
El señor oscuro exige como sacrificio a su hija menor.
Al
escuchar eso siento que me muero, esto no puede estar pasando ¿Porque ahora?
¿porque a mí?
P:
No puede ser.
H:
No vamos a entregarla.
R:
Nada podemos hacer majestad - estoy temblando por dentro.
H:
No la vamos a entregar y se acabó, Ren sal de aquí - lo hace.
S:
Si ese es mi destino lo acepto - digo fingiendo tranquilidad, aunque quisiera echarme
a llorar.
Hyde
se queda un momento en silencio, hasta que…
H:
Esta carta aun no llega al valle y el señor oscuro no sabe que la tenemos, ya sé
qué haremos, según el antiguo tratado no puede tocar a nadie de la familia
real, así que me casaré con ella y así evitaremos que la toque.
S:
Me niego rotundamente, no soy un objeto con el que deciden que hacer.
H:
Señores, ¿Me permiten un momento a solas? - salen - a ver, siéntate.
Hago
lo que me pide y me siento en el sillón, él se sienta a mi lado y toma mi mano.
H:
¿Porque no quieres? ¿Tan desagradable te resulto?
S:
No es eso, solo - tengo que armarme de valor y ser honesta - es que no quiero
que hagas esto por obligación, no es justo, y tampoco deseo eso, quiero que si
lo haces sea porque… porque… porque me quieras.
H:
Niña tonta - toma mi rostro por la barbilla, obligándome a mirarlo a los ojos -
precisamente porque te quiero es que voy a protegerte, ya lo había pensado
desde hace mucho, pero quería que cumplieras tus metas antes de pedirte una
oportunidad, ahora el panorama ha cambiado, pero aun así te lo pido porque te
quiero, no, porque te amo y no quiero que nada te pase, por favor cásate
conmigo.
S:
En verdad ¿Me amas? ¿No mientes? - me cuesta creerlo.
H:
Mucho, nunca me perdonaría si te pasa algo, por favor acepta, te prometo que si
no me quieres te dejaré libre en cuanto el peligro pase.
Hyde
no se da cuenta que precisamente porque lo amo es que me preocupo, ya perdí
mucho no quiero perder más, aunque dudo que sus esfuerzos vayan a funcionar, en
el fondo de mi corazón sé que tendré que afrontar tan cruel destino.
S:
No es que no te quiera - no deseo que se quede con esa idea - es que
precisamente porque te quiero y me importas es que tengo miedo que algo malo te
pase.
H:
Nada me va a pasar, confía en mí, ¿Me dirás que sí?
S:
Si, pero no porque tema por mi vida, quiero porque desde hace mucho siento algo
por ti, algo especial que nunca había sentido y que me confunde bastante.
No
responde, solo se acerca y comienza a besarme, a su contacto hace que me llene
de sensaciones muy agradables pero desconocidas ¿Así se siente amar?
S:
Lo siento, no se besar.
H:
Me gusta esa inocencia que tienes - besa mi mano - pues hay que dar la noticia.
Avisa
a mi padre, Ryu y Ren que hemos tomado una decisión; nos vamos a comprometer,
Hyde les dice que desde hace mucho teníamos ese deseo y que lo haríamos público
en mi graduación, pero a causa de esto lo adelantaríamos para el baile próximo
a realizarse, mi padre y Ryu se ponen felices al saber la noticia, en cambio
Ryu se molesta pero como se debe a su rey no puede hacer nada, Hyde les plantea
que mucha gente se ha dado cuenta de nuestra cercanía y que para nada será
sospechoso, al contrario será más que obvio.
Decido
irme a mi recamara pues, aunque no lo exprese, estoy muy asustada, tengo tanto
temor que las cosas salgan mal y que terminen muriendo las personas que amo.
P:
Hija.
S:
Estoy bien - miento - no puedo creer que me voy a comprometer, es raro.
P:
Sabía que eso pasaría, como dijo el rey, medio mundo se dio cuenta por más que
lo quisieran ocultar, quiero que estés feliz, sé que estas asustada, pero confía
en que encontraremos la solución - me abraza.
Quisiera
pensar como él, pero la última persona que me dijo eso murió y no pude hacer
nada, quisiera llorar, pero sé que eso no va a solucionar nada, solo me queda
tratar de disfrutar el poco tiempo que me queda con la gente que amo.
S:
Lamento haber sido grosera contigo.
P:
No hija, yo me lo busqué, fui demasiado intransigente, soy yo el que debe
disculparse.
S:
No tengo nada que disculparte, lo que sí, es que quiero pedirte un favor,
quiero que me prometas que si algo pasa vas a cuidar de Yuki.
P:
No va a pasar nada y claro que te lo prometo.
Me
siento más tranquila de saber que mi relación con mi padre ha sido sanada y es
que no quiero morir con el remordimiento de no haber estado bien con él.
Ya
entrada la noche llaman a mi puerta…
S:
Adelante.
H:
¿Estas ocupada?
S:
No, pasa - cierra la puerta con seguro.
H:
¿Ya estas más tranquila?
S:
Un poco - se acerca y me abraza - podría acostumbrarme a eso.
H:
Tendrás que acostumbrarte - suelta una risita - ya que estamos juntos, te traje
algo.
S:
¿Qué es? - saca una cajita con un sencillo anillo de plata.
H:
Ya que eres mi prometida debes tenerlo, sé que no te gustan las cosas
exageradas en lujo, por eso elegí este.
S:
Gracias, es muy bonito - me coloca el anillo.
H:
Mañana en la noche soltaremos la noticia ¿Estas nerviosa?
S:
Algo - se acerca y me besa.
H:
Trata de descansar, mi niña.
S:
¿Porque me dices niña?, no eres tan mayor.
H:
No me gusta preguntar las edades, pero tú no llegas a los veinte, eso es obvio.
S:
Tengo diecisiete - respondo apenada - pero tú no te ves de más de veintitrés
años.
H:
Cumplo veintiocho - empieza a reír - que poca moral tengo para enamorarme de
una niña.
S.
No es tanta diferencia - sonrío - te quiero.
Se
acerca y me abraza con mucha fuerza, como si fuera algo tan valioso que no
quiere perder, me hace sentir tan especial, como me hubiese gustado vivir todo
esto sin que hubiera peligro de por medio.
El
gran día ha llegado, todos en el castillo se han emocionado por el evento de
tal magnitud, desde muchos y muy remotos lugares se han dado cita las personas
más importantes. Desde muy temprano se ha trabajado para tener todo a la
perfección, Hyde no ha dado señales de vida por ningún lado y estoy segura que
no está tan contento por tener que soportar tanta hipocresía.
Para
Yuki mande traer un vestido rosa pastel adornado con olanes en un rosa más
fuerte, le pongo unos zapatos al color y la peino con un tocado; en mi caso
decidí complacer a mi prometido y usó el vestido de la vez anterior, en esta
ocasión opto por recoger mi cabello y adornarlo con pequeñas flores de cristal.
Ha:
Te traigo los zapatos ya listos - ella también luce hermosa, mi padre le pidió
que vaya como niñera de Yuki así que la hemos arreglado para la ocasión tan
especial.
S.
Gracias - me los pongo, la abrazo - estoy nerviosa.
Ha.
¡No me digas! ¿Acaso ya te lo pidió?
S:
Sí, hoy lo anunciamos.
Ha:
Ya era hora - me abraza muy emocionada - se tardaron mucho.
Yk:
¿Qué cosa?
S:
Ya lo verás, no digas nada a nadie porque es una sorpresa.
Yk:
Entendido.
Salimos
para reunirnos con mi padre quien luce muy elegante, mi hermana trae un vestido
color esmeralda con adornos en hilo de oro.
A:
No puedo creer que hayas traído ese vestido a este evento.
S:
No le veo nada de malo.
P:
Akane, no empieces, te prohíbo rotundamente que molestes a tu hermana.
A:
Si padre – responde de mala gana.
Continuamos
nuestro camino, para este baile se ha ocupado la sala del rey que es una
habitación enorme donde realizan audiencias públicas. Al entrar veo que todo ha
sido arreglado de una manera hermosa, las mesas están adornadas con centros de
mesa conformados con lirios blancos y en el centro una rosa roja, en el centro
se ha adaptado una pista de baile y justo frente a todo se ha puesto la mesa
del rey. Los sirvientes andan de un lado a otro llevando copas con distintos
vinos y bocadillos.
Se
nos ha dado una mesa junto a la pista de baile y eso es porque durante el
anuncio debo estar cerca para pasar al centro, me pone demasiado nerviosa tener
que hacerlo; Lady Mizuki se sienta con nosotros.
Muchas
de las mujeres que han asistido son jóvenes, van exageradamente arregladas,
ahora entiendo porque le molesta tanto este evento, todas ellas están tras él y
su posición, se llevarán una decepción porque es mío.
P: ¿Y
ahora porque sonríes? - me baja de mi nube.
S:
Es que todo está muy bonito.
M:
Pensé que ahora que te juntas con caballeros, ya no te gustaban estas cosas -
dice de manera mal intencionada.
S:
Ya ve que sí, hablando de mis amigos, voy a saludarlos, con permiso.
Me
llevo a Hana y a Yuki para presentarlas con mis compañeros, como lo suponía
algunos caballeros se ven muy interesados en Hana; Ken se dedica a presumir mis
avances, eso me hace sentir muy orgullosa más cuando me cataloga como su mejor
estudiante o un de sus más talentosas, me da tristeza que, aunque salve mi vida
y me case, ya no será igual, ya no podré ser una jinete y vivir mil aventuras
sobre mi dragón, como reina tendré otras obligaciones.
En
cuanto suena el llamado que indica que el rey se acerca, regresamos a nuestra
mesa donde unos minutos después suena la orden de reverencia colectivo por lo
que todos hincamos la rodilla, una vez que Hyde se encuentra en el centro, nos
levantamos.
Luce
muy atractivo, va vestido de negro, pero no lleva capa o corona, solo trae su
camisa negra y pantalón al juego.
H:
Les agradezco su presencia en este festejo por mi cumpleaños, espero que todo
sea de su agrada - hace una pausa - hoy quiero compartirles mi felicidad, he
decidido tomar una esposa.
Se
acerca a donde estamos, mi hermana pone cara de felicidad pues debe pensar que
ella es la elegida.
H:
Sakura - me extiende su mano - ven.
Doy
unos pasos y tomo su mano, estoy temblando, nos dirigimos al centro, todas las
miradas están puestas sobre mí, es muy incómodo.
H:
Ella es Sakura hija del señor de Higashi, será su reina y mi amada esposa - me
lleva a su mesa donde nos sentamos para que comiencen a servir la comida.
S:
Esto es incómodo.
H:
Te lo dije, pero lo más difícil ya pasó.
S:
No dejan de observarme - tomo vino - es fastidioso.
H:
Luces tan bella que hasta yo no pararía de observarte - besa mi mano.
En
cuanto comienza a sonar la música, mi prometido se levanta y me ofrece su mano,
vamos a pista donde abrimos el baile, por primera vez veo que Hyde muestra un
poco de su sonrisa, después de bailar tres piezas seguidas, decidimos
descansar.
Hyde
es llevado por Ren para conocer gente, decido ir al sanitario para alejarme de
las miradas.
M:
Sakura - se acerca con varias mujeres.
S: Dígame.
M:
Ellas son esposas de los consejeros.
S:
Un placer.
*:
Nunca la había visto en reuniones. - Dice una mujer rubia de ojos azules.
M:
Le gusta montar dragonoides y juntarse con soldados - dice con desprecio, las
damas ponen mala cara - deberás dejar esas costumbres.
H:
Eso no sucederá - sale por detrás del pasillo, no se desde cuando estaba oyendo
- mi madre fue una capitana y su reina, Sakura seguirá preparándose para eso,
si me permiten me llevo a mi prometida.
Caminamos
un poco hasta alejarnos del tumulto de personas, acabamos paseando por los
jardines.
H:
Gracias por complacerme.
S:
No te acostumbres a que te complazca en todo, no soy así.
H:
Lo sé y eso me gusta de ti - me besa.
S:
Te van a ver.
H:
Me vale - suelta una risita - ahora sí puedo decir que estoy contento.
S:
Yo también lo estoy.
Seguimos
paseando por un buen rato, se siente mucha paz al estar con él dando vueltas
entre los árboles; nuestra paz no dura mucho pues debemos interrumpirla para
regresar con los invitados, entre bailes, presentaciones y miradas de odio,
transcurre la noche.
P:
Hija es hora de regresar.
S:
Sí, me retiró - le digo a Hyde.
H:
Los sigo, no quiero estar más tiempo aquí.
P:
Majestad quisiera platicar con usted.
H:
Claro, yo también quiero platicarle algunas cosas.
Hyde
y mi padre se van para mantener su charla, nosotras continuamos el camino, Hana
se lleva a Yuki a su recamara por lo que me quedo sola con mi hermana.
A:
Eres de lo peor.
S:
Si así lo quieres pensar es tu problema.
A:
Me has quitado lo que deseaba y nunca te lo voy a perdonar.
S:
¿Lo que deseabas? ¿Tú sabes lo que Hyde odia? ¿Lo que le gusta? no lo sabes
porque no lo conoces ni lo amas, tú querías el poder, el lujo, eso era lo que
deseabas, pero no entiendes lo que es el amar, apenas yo lo estoy entendiendo,
todo esto es nuevo para mí, tú lo sabes, que nunca he estado preocupada por
estas cosas pero pasó, me enamoré y lo callé, él me correspondió, él me lo pidió
no a nuestro padre, a mí - suspiro - Akane no te odio, al contrario te quiero y
sé que has sufrido, tú no sabes el infierno que pasé y jamás desearía que te
pase, al contrario deseo que te enamores de un buen hombre, quiero verte casada
pero feliz, no con lujos sino feliz con tu esposo, que te respete y te quiera
bien, así como yo lo quiero a él. - Se queda un momento en silencio.
A:
Ten cuidado con las damas de la corte, son unas víboras, te han comido a tus
espaldas, especulan muchas cosas, empezando por lady Mizuki.
S:
No les temo a esas brujas, pero no quiero estar mal contigo, no pido que me
quieras solo no quiero pelear.
A:
No es que no te quiera, lo que pasó me marcó demasiado pero el día que nos
secuestraron sentí un poco del temor que tú sentiste.
S:
Me alegra que no te pasará nada.
A:
Creo que después de todo, te mereces ser feliz, ya has sufrido mucho.
Sus
palabras hacen que sienta mucho dolor pues ella no sabe lo que está pasando,
tal vez merecía ser feliz pero el destino se ha encargado de evitarlo, me
abrazo a ella mientras lloro, primero se desconcierta, pero termina
correspondiendo mi abrazo.
S:
Quiero que me prometas algo - limpio mis lágrimas.
A:
¿Qué cosa?
S:
Que vas a ser feliz, promételo por favor.
A:
Te lo prometo.
S:
Y también trata con cariño a Yuki.
A:
Lo haré, pero ¿Qué te pasa?
S:
Es un presentimiento - no puedo decirle - que algo malo me va a pasar.
A:
No pienses así enana, mejor enfócate en tu boda.
Hace
tantos años que no me decía así, no sé si nuestra relación llegue a mejorar,
pero por lo menos le dije lo que siento y espero ella cumpla su promesa pues
realmente deseo que ella tenga la vida plena y dichosa que yo no he podido
tener y que difícilmente voy a alcanzar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario